HAGAMOS UN TRATO...

Hagamos un trato...
aunque ya no se estile...

aunque esté denostado...

Hagamos un trato...
sellado
entre huella y caricia...
entre caricia y beso..
entre beso y silencio...

Amémonos despacio...
cómo si el fin del mundo
estuviera próximo...

vivamos lento...
cómo si en realidad
nada importara demasiado...

escuchemos la noche...
trémula y argentina
cómo plateda hebra..
de tela de araña...

que agazapada en la esquina...
de cada madrugada
reina en la penumbra..
de este gran juego de ajedrez...
en el que somos
concursantes...

o quizás...jugadores...
de ébano y marfil...

quién sabe...

Hagamos un trato...
firmado
con pluma y grafito...
subrayado en negrita
en el pergamino aterciopelado...
casi...casi...translúcido
que forman nuestros cuerpos...

cuando danzan en adagio...
ebrios de luna
en el tablero cuadriculado...
matemáticamente bicoloreado
donde se pierde el horizonte...

por qué está demasiado lejos...
o quizás...demasiado cerca
a vuelo rasante de halcón..
o a puntillas encaramadas
de arlequín...

quién sabe...

Me gusta...
cuando callas
por qué..
puedo leer en tu mirada...

Me gusta...
cuando rompes el silencio
y enmudeces de repente...
porque
querías decir algo...

pero no dices nada...

y dejas que tu mirada...
sea la que hable
en cursiva...

y dibuje...
con el irisado pincel
de tu retina..
sobre el nacarado pergamino...

que contiene...
sin apretar demasiado
mi esencia acuática...
de nenúfares y líquen...

cáliz eterno...
de mil y una madrugadas...

aquello que...
no osaste
decir en voz alta...